sábado, 20 de octubre de 2007

Venganza Inconsciente

Daniel detesta nadar a las 5 de la mañana, pero debe hacerlo para mejorar sus marcas, debe hacerlo para recuperar el lugar que le corresponde dentro de la seleccion nacional. La mamá de los hermanos Alcántara siempre lo jala a esa hora, cada vez que se encuentran dentro del auto Gustavo y Alonso Alcántara conversan con Daniel sobre las marcas y lugares que vienen ocupando.
Daniel se cambió de club después de lo que pasó en las eliminatorias para la copa del mundo. Ahora está en el club Hípico, le gusta mucho el ambiente, la gente es muy amable y han sabido omprender la situacion de Daniel. Él ha perdido toda confianza en si mismo por mas que entrena empeora en sus marcas. Su encantadora entrenadora lo motiva mucho, conversan, se ha vuelto su amiga. Ella le dice constantemente que el talento nunca se pierde y que él es un Mercedes Benz malogrado que falta reparar mientras hay mucho autos baratos que siempre estan en perfectas condiciones pero que nunca llegarán a compararse al auto alemán, haciendo claro el mensaje de que si existe talento, sólo quedaría seguir esforzandose hasta pasar la mala racha.

Han pasado 3 meses la mala racha no para. El ranking nacional no le favorece en lo absoluto.Daniel no es más el equipo Nacional.Está pensando en retirarse, mandar todo al diablo. Sabe que a su padre no le gustaría la idea, pero cuando se lo comenta recibe todo su apoyo. Es entocnes cuando decide no seguir más e inmediatamente llama a su club para comunicarle la decision a su entrenadora, ella no está. Él le deja el recado.

A las 8 de la noche Adriana, su entrenadora lo llama. Le dice que no sea huevón.como se va retirar después de tanto esfuerzo. le sugiere que se de a sí mismo una oportunidad, que espere hasta las eliminatorias para los juegos Panamericanos.
Daniel piensa en él,las madrugadas de nuevo. Piensa en Claudio, en Abel. Aprieta los dientes.

Son 5 de la mañana, Daniel esta despierto esperando a la mamá de los Alcántara. Ha decidido que si se va dar otra oportunidad, va hacer su mejor esfuerzo. Adriana le ha conseguido un psicólogo deportivo al que debía atender en el club hípico 3 veces a la semana. En un principio Daniel sólo piensa en cuanto dinero gana el psicólogo, sus honorarios le parecen exagerados, pero este se gana su confianza, hablan mucho, hablan de sus problemas.Dani se empieza a sentir mejor, tiene mejor semblante, mejor carácter y en los entrenamientos se nota la mejora.

Faltan un par de meses para las eliminatorias de los Panamericanos. Daniel se siente muy seguro. Hay una competencia en Colombia. El club Hipico ha sido invitado Daniel cree que el viaje le hará bien pues podrá enfrentarse a gente de afuera y de paso poner en práctica muchas de las técnicas aprendidas con el psicologo.

Bogota-Colombia es muy lindo en invierno, Daniel disfruta mucho la ciudad, los constantes viajes hicieron que alguna vez se diera cuenta que de todas en las que ha estado, Lima es la mas fea. Llega el día de la competencia, están por llamarlo a los carriles de competencia. Aparece Claudio, el San Andrés también había sido invitado. Daniel saluda a Claudio de una forma bastante distante. Nota en él una mirada diferente, con aires de superioridad. Claudio habla con sus amigos sobre su viaje a Madrid por la Copa del Mundo. A Daniel lo comienzan a invair fantasmas del pasado, de alguna forma ve a Claudio mejor preparado.

Dan la partida, los primeros 50 metros Claudio va ganando, le ha sacado más de dos cuerpos, recién empieza la carrera y Daniel s eisente cansado, pesado. Llegan a los 50 metrosy dan la vuelta. Transcurren 3 metros más y Daniel sigue detrás de Claudio. Pero algo diferente pasa, él ve a su entrenadora alentándolo con una toalla roja, lo puede ver clarísimo. De pronto Daniel se activa, empieza a creer en si mismo y por un momento piensa que puede lograrlo. Deja su vida en los 15 metros restantes de carrera pero llega segundo, Claudio le ganó de nuevo.

Daniel va a hablar con su entrenadora después de la premiación, él se siente mal por la derrota. Y empieza a esbozar mentalmente las recriminaciones que su entrenadora le haría. Adriana le dice que estuvo genial, que lo había visto mejor que nunca, que había recuperado lo que hacía tiempo no tenía. Huevos.

Los entrenamientos siguieron, madrugadas y todo. Faltan sólo 3 días para el día de la competencia. Daniel esta mentalizado, seguro de ganar e irse a Canada a los Panamericanos. Adriana ha hehco un gran trabajo, se dice a si mismo. Él está agradecido con ella, pero no le dice nada, nunca fue muy expresivo. Sus amigos del club lo apoyan mucho lo animan, las chicas le depilan las piernas y los amigos se encargan, mediante adjetivos ofensivos, de bajar la imagen de Claudio que Daniel llevaba en la cabeza.

LLegó el día esperado. Daniel le pide a su padre que lo lleve, no quiere ir en taxi porque tiene miedo de que choque y le friegue todo el tiempo de entrenamiento. Su padre lo lleva, en el carro le dice que gane o pierda siempre estará orgulloso de él. Daniel sabe que su padre dice eso por quitarle presión, pero pasa totalmente lo contrario.

Daniel tiene la charla precompetitiva con Adriana. Adriana dice puras lisuras motivándolo, Daniel ríe y le dice que ese no es lenguaje propio de una del Villa.El está relajado.
Los nadadores van hacia los carriles de competencia esperan un momento, Daniel se encuentra con Claudio de nuevo, se desean suerte de manera hipócrita y se alejan para que cada uno pueda empezar su estiramiento respectivo.

Dan la partida, mientras Daniel esta bajo del agua se siente fuerte, siente que avanza muy rápido. Se da cuenta de que Claudio está a su lado, van empatados. Pasan los primeros 50 metros. Marcan el reloj parcial en tiempos muy parecidos, de vuelta ve a Adriana con la toalla roja, alentándolo, pero tambien ve a todos sus amigos y amigas del Club Hípico, gritando desesperadamente por darle aliento, nunca había visto nada igual, se siente feliz. Faltan sólo 20 metros y siguen empatados. Daniel se acuerda de cuando Domingo el excampeon sudamericano de 100 espalda le dijo que los ultimos 15 metros de la carrera eran puros huevos. Daniel ve la pita que anuncia los últimos metros de la prueba, cierra sus ojos y simplemente decide dar todo. Patalea y bracea con toda las fuerzas que le quedan en el cuerpo, está dispuesto a agotar cualquier clase de energía que se aloje dentro de él. Toca la pared, no quiere abrir los ojos, no quiere sacarse el gorro, sólo quiere quedarse ahí en el agua. Escucha a Gustavo Alcántara y Adriana gritar:-Bien Dani!!!!!!- Daniel había clasificado para los Panamericanos y mejor aún, se había reconciliado con la natación.

Daniel tiene 13 años, el esta en 2do de secundaria. Depués del colegio debe ir a entrenar, primero correr 40 minutos, luego gimnasio por una hora, para termirnar con 2 o 3 horas de entrenamiento en la piscina. Llega a su casa a las 9pm, cansado, muy cansado. Pasa por la puerta busca su habitación y se tira a la cama. No se puso pijama.

4 comentarios:

payis dijo...

No dejas de sorprenderme, morales... No deje de sonreir mientras leía! claaaaaaaaaps!!
pero: ¿cómo te muerdes los dientes? y sí, tienes razón, ese no es vocabulario de una del villa, obvio que lo sabemos =)

Anónimo dijo...

"Todo gran logro ha sido precedido por un gran pensamiento y decision"

Genial!! Daniel Recupero la confianza en si mismo que es una de las cosas mas importante para emprender todo sueño que se quiera alcanzar!

Esta muy bonita la historia Sebastian!

T dijo...

wow! nice nice, very nice...me gustó...buen estilo narrativo, cuatro estrellas de cinco u_u

Anónimo dijo...

como te dije sebas por el msn en un principio pense ke era una historia tuya con el nombre caleta de daniel pero igual esta interesante porque tiene un mensaje motivador y lleno de emocion...paja te felicito amigo...!!!hare lo mismo creo con mis historias mas ke nada de aventuras...tu sabes...jaja suerte!!!