viernes, 18 de abril de 2008

UNA MEJOR PERSONA

Es jueves, son las 9:40 pm y se encuentran. Daniel esta confundido, no sabe que decirle. Ella le dice que ha venido solo por unos días y que dejaría la ciudad al día siguiente por la tarde. Daniel le propone almorzar el viernes antes de su viaje, ella acepta cortésmente y le deja los datos del hotel para que la vaya a recoger.

Ella es Claudia, una chica hábil, ingeniosa y preciosa. Ha venido a Lima para una entrevista de trabajo. Un trabajo que si le dieron y cuyo título es muy sofisticado.
Daniel no la ve desde cuando viajó al norte a medio año, han pasado mas de 6 meses y aunque sabe que nunca se han visto muy seguido, estaba casi seguro de que no la volvería a ver. Por que? Porque ella ha empezado a hacer una vida allá.

Durante el encuentro la conversación se torna poco fluida y acaba rápidamente. Daniel esta en su cuarto son las 10.30 pm y decide llamarla al hotel, conversan más y mejor, ahora que no se miran todo fluye. Daniel cree que un almuerzo es demasiado poco para todo lo que han vivido, además el almuerzo debía ser rápido porque Claudia tenía que terminar unos papeleos. Es así que él le propone salir esa misma noche, ella no ve problema alguno en salir a tomar algo y volver lo suficientemente temprano para asistir a un evento que requería su presencia por la mañana.

Después de media hora Daniel, cambiado y bañado, esta en el hotel. Espera junto al ascensor, la puerta se abre y ahí esta ella, mas linda que nunca. La mira como si fuera la primera vez que la viera. Toma su mano y se dan el abrazo que no se dieron al encontrarse. Él le pregunta a donde quiere ir, ella le responde que él es el anfitrión y por eso él tendrá que decidir. Él le comenta que eso no le conviene.

Acuerdan ir a Miraflores a uno de esos bares al que alguna vez fue por su cumpleaños. No hay mucha gente, la música es buena. Piden algo para tomar y hacen lo mejor que han hecho juntos, conversar, la química es inevitable, él la hace reír y ella despierta la ternura mejor guardada en Él. Daniel adora la forma en que sonríe, le encanta ver como se tapa la boca cuando se ríe y el misterio en sus ojos no hace más que revelar lo bella que es.


El lugar deja de ser entretenido, y deciden ir a otro sitio. Llegan a un bar brasilero que esta frente al parque Kennedy, Él pide unos shots clásicos que luego de probar ella rechaza debido a la fortaleza del trago. Daniel le ofrece comprarle un trago más ligero ella acepta cortésmente. Los tragos se terminaron y deciden caminar. Él toma su delicada mano. Ella la sostiene y lo mira, hay algo.

Se sientan cerca de un edificio al que Daniel solía prestarle servicios de diseño interior. Hablan, hablan mucho, hablan de lo que había pasado. Igual ríen. Demonios es preciosa. Él la besa, después de mucho tiempo tenia ahí a la persona que extrañaba tanto. Él le confiesa que la quiere, que en cada conversación, cada beso, cada risa siempre la quiso. Ella le responde que siempre lo amó.

Él la mira con la ternura que nunca revela y con la pena de saber que ella ya tiene otra vida. Pero esa noche era para ellos y nadie más. Esa noche el mundo desapareció y revivió ese sentimiento tan bien cuidado por ambos.
Ese amor, intacto y sublime, que hizo de ellos lo más especial en lo que a tipos de pareja se refiere, hizo que se junten y por última vez, sean las personas más felices del mundo.

Es viernes, es la 1pm Daniel se ha demorado un poco en ir a recoger a Claudia para almorzar, teniendo en cuenta que el almuerzo no podía prolongarse mucho, escogen un restaurante cerca al hotel. Conversan mucho, se aman y no lo dicen, el día en que eran ellos mismos había pasado. Ella debía volver a su ciudad, su vida y su trabajo sofisticado, y el tenía que olvidar lo feliz que había sido y regresar a la oficina que lo estresa tanto para hacer ese trabajo que ya no disfruta mucho.

El almuerzo acaba muy rápido, el la deja en el hotel, sostiene su mano y la suelta muy lentamente sabiendo que es muy posible que no la vuelva a ver jamás. Ella le da el beso mas dulce y se despide.

Mientras Daniel llega a su casa, los recuerdos de días pasados con Claudia abordan su mente, los regalos, los viajes, las largas y entretenidas conversaciones, los besos, las caricias, los abrazos, las sonrisas, las miradas, las bromas, las aventuras, el amor, todo eso, de cierta forma, han hecho de él, una mejor persona.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Las cosas lindas duran poco y hay que disfrutar todo lo que la vida nos brinda dia a dia, yo siempre trato de hacerlo y espero que Daniel tambien.

Barbarita dijo...

Ese Daniel es un romántico. Sí! Será que el amor nos contagia a todos su ternura?

"Ta' q' me emocione brother!"

Ñaño, no dejes de escribir, que lo haces excelentemente bien =)

"That's the way, aha aha, I like it, aha aha"

Anónimo dijo...

que bello escribes!!!! :)

Anónimo dijo...

que bello escribes!!!! :)

Strokes of Love dijo...

Hay tanta ternura en cada palabra que expresas!... Sabes, a pesar de todo lo que puede suceder el amor guarda una linda promesa!!!.. y es que el amor nunca pierde la esperanza!.. el amor puede romper los limites del tiempo, esperar lo inesperado y soportar lo insoportable!.. el amor siempre prevalecera!

Alex Eduardo dijo...

genial esas historias de Daniel, jajaja, tu sabes ke para mi el amor lo he apartado de mi vida por un tiempo. Pero me parece bien ke sientas eso ke es amor. Es chevere, te atrapa, te sientes atrapado a eso ke no sabs como explicar, kisieras ke no e vaya, pero le sucede A LOS MEJORES! SI O NO¿ jeje Saludos DanielSAN