El Starquitecto

Hace un par de días en un bar miraflorino, conversaba con uno de mis mejores amigos, Collado, me contaba de la absurda manera en que estaba enamorándose de Mariell, una recientemente graduada abogada con quien venia compartiendo las mejores conversaciones y diluyendo miradas uno con el otro en las últimas semanas. Me contó de cómo la conoció, de cómo a raíz de que ella dejo la empresa donde ambos trabajaban empezaron a hablar más. De cómo ella era fácil de llevar, fácil de entender y mucho mas fácil de contemplar. De cómo su sentido común, inteligencia y buenas intenciones lo habían cautivado de sobremanera. También me contó de cómo no se atrevía a decirle nada, ella viene de una relación me dijo, yo lo comprendía totalmente, se que abrirse y contarle a alguien lo que uno siente es lo mas difícil del mundo, al menos para personas como Collado y como yo. Le di animo, uno que otro consejo, lo que no debía hacer, y Collado –Voy hacerlo- Vi la madurez, decisión y determinación en sus ojos...